Llevo más de 7 años acompañando a personas en procesos presenciales de desarrollo personal y profesional.
Para mí es un privilegio que confíen en mí.
A todos nos ocurre alguna vez en la vida: nos sentimos bloqueados, desbordados de emociones y sin claridad para avanzar.
En momentos así nos puede ayudar que un profesional nos tienda una mano y nos ofrezca escucha activa (sin juicios ni opiniones), preguntas poderosas para poder hacer descubrimientos, tomar conciencia de nuestras creencias y emociones y cambiar la perspectiva para así poder alcanzar nuestro objetivo, sentirnos mejor y disfrutar más de nuestra vida.
Si necesitas un coach para acompañarte un tramo del camino… ¡Aquí estoy, muy cerca!
Ahora también con sesiones on line.
Estamos viviendo tiempos muy intensos y complicados.
Para afrontar en positivo esta pandemia provocada por Covid-19, es necesario parar un instante, respirar hondo, soltar nuestra emoción, identificar nuestras creencias limitantes, tomar perspectiva, valorar la situación y…
¡ENFOCARNOS EN SOLUCIONES!
Esta frase me la enseñaron a los 13 años y me ha acompañado y ayudado a lo largo de mi vida.
Sí, todos tenemos días malos, he incluso temporadas malas. Momentos difíciles en los que lo vemos todo negro, muy negro, e incluso no vemos solución a cosas que realmente sí la tienen y sólo tenemos ganas de llorar y “tirar la toalla”.
Bien, no te niegues ese momento, reconócelo, acéptalo, vívelo y en cuanto puedas, ponte a pensar:
— ¿Qué me puede ayudar a LEVANTARME de nuevo?
— ¿Cómo RECUPERAR mi energía?
— ¿Cómo he hecho otras veces para AUTOMOTIVARME y seguir adelante?
— ¿Qué cosas necesito CAMBIAR en mi día a día para evitar otras caídas?
Y recuerda, es fundamental que te fijes en las pequeñas acciones, pon tu energía en aquello que está a tu alcance aquí y ahora (no sólo en vacaciones).
Estoy convencida de que si dedicas un rato a responder estas preguntas, encontrarás las estrategias y acciones que mejor te funcionan a ti, y si no, necesitas un coach :).
En coaching sabemos, que cuando nos planteamos conseguir un objetivo, la mayor parte de las veces nuestro peor enemigo somos nosotros mismos.
Pensamientos del tipo: “no, si yo no puedo”, “no me lo merezco”, “es muy difícil”, “yo nunca tengo suerte”, “ya lo he intentado”, “esto no es lo mío”, “para qué esforzarse si luego seguro que no sale”, etc. nos vuelven inseguros y nos restan la energía que necesitamos para actuar de forma creativa, para generar un plan A, un plan B y uno C, D… si los anteriores no funcionan. Nos restan energía para trabajar para conseguir lo que deseamos y perseverar aunque los resultados no sean inmediatos.
Hoy te invito a que leas el cuento que pongo a continuación (procede del libro: “Déjame que te cuente (Recuentos para Damián)” de Jorge Bucay. Me ha resultado muy inspirador, espero que te sirva la próxima vez que pienses “¡no puedo!”: